Paz mi pez es una marca, un charquito en el universo

que ha brotado del impulso de contarle al mundo entero

que la paz no es una cosa que se firma en un papel;

sino un estado que se activa desde el fondo de su Ser.

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Somos un sancocho entre verso y cantaleta,

pues creemos en el verbo como magia que conecta.

Ni maestros, ni eruditos; aprendices como usted,

simplemente compartimos lo que enciende nuestro Ser.

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Nos inspiran aguas claras, fuentes puras de belleza,

que dan luz a nuestro anhelo de alcanzar la dicha eterna.

Alma abierta, pies en tierra y ojos fijos en el sol,

perseguimos lo invisible, pues amar es la misión.

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En resumen, nuestro propósito es
producir paz, unión y conexión pa este planeta,
a punta e’ verso criollo, reflexión y cantaleta.
Esa es la receta.

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En el año 2016, tres meses antes del plebiscito

pa´ refrendar el acuerdo de paz en Colombia,

llegó del cielo, una idea muy sencillita:

hacer una campaña con camisetas que

llevaran un mensaje de paz.

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Camisetas que pudiesen trascender la bruma ideológica

e instalarse sin política ni religión en el centro del Ser.

El mensaje fue claro: ha de llamarse Paz mi pez.

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En Colombia, "mi pez"

es una expresión coloquial,

equivalente a "mi amigo",

"mi hermano", "mi parcero".

Y así empezó la cosa: sin mucha cosa.
Diez camisetas de hombre y diez camisetas de mujer.
Al cabo de unos días, y con el ánimo de hacer
un llamado a la acción, nos dio por cantaletear
a través de frases y retos, que muy pronto
tomarían fuerza y vida en redes sociales.
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Hoy, Paz mi pez es el movimiento que nutre
y acompaña el proceso de paz que vivimos como país,
pero no desde el papel o la teoría, sino desde el rol
que cada humano esté dispuesto a asumir en su vida,
entendiéndose a sí mismo como un creador activo
de su propia realidad, evolución y transformación.

Muchas gracias por leer, ahora cuéntenos alguito sobre usted

¿Se le antoja un chiro?

Cuéntese Alguito